Los domingos de la televisión latina están atestados de programación de alta gama. Tan es así que desde las seis de las tarde nos llega “Sí Se Puede” por Telemundo. Este “reality” de desafíos es una coproducción con TV Azteca. A decir verdad es muy raro ver las celebridades concentradas únicamente en un estudio televisivo nada más con el propósito de llevar a cabo retos físicos. Me dio un poco de claustrofobia el estudio tan oscuro, pero con iluminación azul. Ahora, no le restó al atractivo principal del programa que es observar bien el trabajo que han de desempeñar las celebridades más adelante.
El grupo de celebridades ahí
presente se ve cohesivo, libre de dimes y diretes. Esperemos que así se
mantengan según la competencia avance. Desde el primer capítulo Toni Costa se
dio a conocer más allá de bailarín, Papá de Alaia y esposo de Adamari López. Maripily
Rivera se muestra más madura en esta
salida televisiva. Su amistad con Lis Vega fuera de cámaras la está ayudando,
aparentemente a desarrollarse mejor. A
pesar de su lesión en el brazo, no ha tenido grandes ataques de coraje o de
nervios.
Hablando de Lis, como siempre su
elegancia y disciplina dan de que hablar. En esta quinta semana se llevó la
inmunidad de mano de Toni Costa. No nos
olvidemos de la siempre divina Catherine Siachoque, quien juzga la dura competencia.
Creo que la victoria está entre Lambda, Toni y Lis.
En Telemundo la noche fluye con
“D.C. La Biblia Continúa” y “Francisco.” Se le ha devuelto al domingo la
espiritualidad con esta programación. Ahora descansamos un poquito de las películas.
¡Amén!
¿Qué me dicen
de Univisión con la gran noche de “La Banda”? A decir verdad, los jueces son el
mayor atractivo. Alejandro Sanz y Laura Pausini tienen una complicidad preciosa
ante las cámaras. Las caras que pone Alejandro valen un millón, como decimos
los boricuas. No hay ni que preguntarle lo que piensa. A la hora de conversar
con los participantes, les dice la verdad sin sobresaltarse a pesar de sus
gestos. Es un verdadero caballero. Lo cortés no quita lo Cabral en su caso.
Por su parte,
Laura a pesar de ser firme es muy
maternal con los muchachos. La bandera de madre y artista la lleva en alto en
todo momento. Al dar sus juicios, no le oculta a los muchachos que sin humildad y disciplina no se alcanzan las
metas.
Ricky Martin es
un poco más severo que Alejandro y Laura. Como productor ejecutivo y manejador
de La Banda tiene que serlo. Su prestigio está en juego. Sin embargo, eso no lo
separa de los otros jueces. Funcionan como una sola unidad. Esa solidez impacta
en un “reality.” Le están dando el ejemplo de profesionalismo a los jóvenes y
el púbico de verdadero compañerismo y compromiso con el concepto. Si tienen
diferencias, lo resuelven sin griterías. A menos que no estén guardando las
garatas para los episodios finales. Espero que no.
En cuanto a los
participantes se refiere, los veinte chicos que quedan son talentosos,
bastantes guapos y con ángel...pero quisiera que el programa fuese más allá de
esos rasgos superficiales. A lo mejor lo están guardando para los últimos diez
chicos. (En ese grupo quisiera que esté Matthews Charloutten y Joshua Greaux
por sus looks y voces inusuales) Espero que así sea. Las chicas que han votado
en vivo lo merecen y la teleaudiencia también.
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